¿Cómo tocar en el Metro de Madrid?

La guía definitiva para tocar en el Metro de Madrid

Los inicios de Treinta al Rojo se labraron en las calles y trenes de la ciudad de Madrid; lugares interesantes que nos enseñaron más que cualquier escenario, y posibilitaron que hoy tengamos nuestro primer disco online y un proyecto con miras de futuro. Es por esto por lo que en este artículo queremos compartir con vosotros los tips definitivos para tocar en el Metro de Madrid, porque nadie con experiencia se ha molestado en colgar en internet ningún tipo de información útil, tal vez por miedo a que el negocio seacabe.

Hay que decir que nosotros nunca hemos engañado a nadie en el Metro diciendo que no teníamos para comer o haciendo creer una cosa a la gente que no era cierta. Nuestra filosofía siempre ha sido la de: “somos dos chavales simpáticos que venimos a tocar la guitarra y a cantar, ¿te gusta y nos quieres dar la voluntad? ¡genial!, ¿no te gusta? ¡buenos días!”. Os aseguramos que así se puede ganar algo de dinero. Es cierto que tocar en la calle o por los trenes es una solución para aquellos que no tienen otro medio para ganarse la vida, pero no por ello es algo reservado exclusivamente para gente en esta situación; las calles son de todos, y siempre que actuemos con sentido común y respeto, deberemos sentirnos libres de ejercer nuestras actividades artísticas en ellas.

Así que pasamos a lo concreto, consejos útiles para tocar en el Metro. Otro día hablaremos de cómo tocar en el Parque del Retiro de Madrid, que es mucho más sencillo, paso a paso.

¿Dónde tocar dentro del Metro?

Las opciones más primarias son dos: los andenes, o el interior de los vagones. En los andenes está permitido tocar, y ningún guardia te pondrá ningún problema, sin embargo tienen dos desventajas principales:

  • Los sitios buenos para tocar en las principales estaciones e intercambiadores están cogidos por personas que como rutina tienen el tocar allí. Realmente no hay ningún registro de propiedad sobre la esquina de un pasillo, pero ¿no está feo quitarle el sitio donde lleva tocando años a una persona que está ahí? Creemos que es poco ético.
  • Se gana menos dinero en los andenes que en los vagones: debido a múltiples motivos ­(como que tu actuación tiene menos impacto en número de personas o que te escuchan un menor número de tiempo, o andando con más prisa y no tranquilamente dentro del tren), los andenes producen un ingreso sustancialmente menor que los vagones. La gente que toca allí normalmente es porque acarrea instrumentos que no podría mover por los vagones (como un teclado con un amplificador eléctrico), porque simplemente no le apetece pasar las complicaciones que acarrea ir de un lado a otro (que es cansado), o porque prefiere la tranquilidad de un sitio fijo.

Dicho esto como imaginarás, nosotros siempre hemos tocado dentro de los vagones. Realmente es aquí donde se da la actividad más importante, y donde deberemos tener en cuenta muchísimos factores que os vamos a explicar a continuación.

Por otro lado cuando hablemos de las mejores líneas para tocar, deberemos tener en cuenta los siguientes factores, que aunque nunca han sido recogidos en ningún sitio, hemos recopilado como fruto de la experiencia:

  • Cantidad de gente que viaja en la línea.
  • A raíz de lo anterior, el número de conexiones con otras líneas que tiene aquella en la que tocamos: si son pocas, normalmente habrá menos gente (como en la línea 12) y no nos convendrán. Sin embargo si son demasiadas (como en la 10), a veces la saturación de personas impedirá que tengamos el espacio suficiente para poder desempeñar nuestra actividad (pensemos en que somos dos personas con dos guitarras, y que además necesitamos que la gente que hay en el mismo vagón tenga el suficiente ángulo visual para vernos).
  • Las zonas que transita esa línea: puede parecer muy curioso, pero nos dimos cuenta bien pronto, que en el tramo de la línea 6 que pasa por el sur de Madrid (Legazpi, Usera, Arganzuela o Mendez Álvaro), la gente daba mucho menos dinero que en la zona norte (Nuevos Ministerios, Diego de León o Príncipe Pío). Y no es que debiera afectar especialmente el nivel socioeconómico de los barrios donde se encuentran las paradas que pasamos, porque los madrileños se mueven por todas partes independientemente de dónde vivan, pero es cierto que esto es así. Serán varias las cosas que contaremos a lo largo de este artículo, que aun sabiendo que son así por experiencia, tendrán una difícil explicación lógica; hay que acostumbrarse.

Nuestra selección por tanto, por este orden en base a lo que hemos podido comprobar, será:

  • La línea 6 entre las estaciones de Pacífico y Alto de Extremadura (yendo por el norte).
  • La línea 9 entre Plaza Castilla y Sainz de Baranda.
  • La línea 10 entre Plaza Castilla y Batán.
  • La línea 1 entre Plaza Castilla y Atocha (esta la añadimos como última opción, pero no recomendamos experimentarla, porque el problema suele ser que la saturación de gente impide tocar, todo depende del día y de la hora).

¿Cómo tocar en el Metro?

Pasamos a continuación a hacer una lista de pasos que hay que seguir, desde el momento en el que se cambia de vagón o se entra en un tren para empezar a tocar, hasta el momento de irse habiendo pasado la gorra:

  • Entrar al tren con el instrumento afinado y la actuación pensada y ensayada. Tendremos que pensar en varias cosas a la vez, así que conviene llevar todo lo que a lo musical se refiere aprendido.
  • Localizar con la mirada un punto donde no molestemos (no nos pondremos cerca de un carrito de bebé o de una persona que va hablando por teléfono), donde la gente nos vea y oiga bien (preferiblemente en el centro del vagón), donde estemos cómodos, y donde podamos ver bien por los cristales lo que pasa fuera del tren (por los guardias, tema que analizaremos luego). Iremos a situarnos allí.
  • Hacer una presentación: nosotros tenemos muchas presentaciones ensayadas que con el tiempo han ido saliendo solas, pero os animamos a inventar diálogos divertidos, con chistes que llamen la atención de la gente y que hagan reír. Este punto será el que nos diferencie de una persona que pide limosna, nosotros somos músicos que venimos a divertir, es muy importante que la gente lo sepa; jugar al equivoco sería de lo más inmoral si no estamos en una situación de verdadera precariedad.
  • Hacer nuestra actuación: teniendo cuidado para no caernos y manteniendo el equilibrio en el tren, vigilando que no haya guardias en el andén cuando entremos a una estación (luego veremos qué hacer en estos casos), con un tono de voz y con un sonido lo más limpio, alto y claro posible (sin ser ruidosos), con una sonrisa siempre en la cara y muy buen rollo, y con todo lo que irás aprendiendo con el tiempo si algún día te decides a tocar en el Metro; solo o acompañado.
  • Dar las gracias: quizá la más importante. Puede ir acompañada de un chascarrillo que nos haga terminar de caer simpáticos.
  • Pasar la gorra: con alguna frase que indique que si han disfrutado de la actuación, se agradecerá una pequeña voluntad. Recordemos, todo con un tono afable y amistoso, sin ser pesados, ni insistir con la mirada, ni nada.
  • Despedirse educadamente y pasar al siguiente vagón para empezar la maniobra de nuevo.

¿Cómo aprovechar el tiempo de la mejor forma posible?

Cuando tocamos en el metro el tiempo juega en nuestra contra. Cada minuto que estamos esperando a un tren, haciendo un transbordo o recuperando el aliento, es tiempo en el que se está dejando de ganar dinero, así que habrá que proceder siempre sin prisa (para no agotarnos enseguida, que esto es más duro de lo que parece), pero sin pausa (para optimizar al máximo nuestras posibilidades).

Lo normal será tratar de completar todos los vagones de un tren antes de pasar al siguiente, y cuando cambiemos, lo haremos dando la vuelta sobre el trayecto ya realizado. Según nuestra experiencia, un tren de la línea 6 normal, en condiciones normales, se hace en unas 10 u 11 estaciones, esto es aplicable a otras líneas, y dependiendo de la actuación de cada uno podrá variar, así que al principio habrá que tomarse la medida a uno mismo.

Los cambios habrán de hacerse con cuidado para no ser sorprendidos por los guardias en el caso de que tengamos signos evidentes de estar tocando dentro de los vagones (como llevar instrumentos sin funda), si por lo que sea los llevamos dentro de la funda, podremos hacerlo con calma. De ser la situación la primera y correr el riesgo de ser sorprendidos, siempre podrá ir una persona delante con las manos vacías para comprobar, y otra detrás cargada que siga las instrucciones de la de delante respecto a por dónde ir, a una distancia prudencial. En el caso de ser sólo una persona, habrá que ir despacio y con ojo: mejor perder un tren a que nos echen del Metro.

No hay que obsesionarse con coger el próximo tren si vemos que queda un minuto. Hemos dicho que el tiempo es importante sí, pero debemos pensar que son muchas horas de pie, en posiciones no muy cómodas y actuando para colmo; de forma que sentarse cuatro minutos a esperar al siguiente tren tampoco será un inconveniente.

¿Qué pasa si te pillan los guardias tocando?

Generalmente no pasa nada. La verdad es que es difícil que te cojan con las manos en la masa, a nosotros en estos años sólo nos han sorprendido dos veces, por una tremenda mala suerte (en ambos casos íbamos tocando, y el tres se paró justo frente al guardia); también es cierto que más de una vez o nos han visto y nos han obviado, o hemos corrido y no nos han cogido.

En teoría si te pilla un cono (así es como los llamamos, por su color anaranjado en el uniforme), puedes ser sancionado con una multa, sin embargo te aseguramos que esto no pasa jamás, y son muchas las horas en el metro y mucha la gente que hemos conocido. Normalmente a los guardias les da tanta pereza ponerte una sanción como a ti recibirla, así que lo normal es que te acompañen a la calle y se olviden del asunto. También debemos decir, que nunca nos hemos encontrado a un cono borde, suelen ser personas bastante amables que juegan al mismo juego que nosotros, si te pillan, hasta luego (también muchos han hecho como que no nos han visto, y se lo agradecemos); pero por lo general no recibirás un mal trato o una bronca de uno. Se parece más al juego del gato y el ratón que a una relación de autoridad.

En el caso de que te sorprendan te recomendamos bajar tu instrumento y andar en la dirección opuesta, con un poco de suerte pasarán de ti (cosa que a lo mejor puede extrañar, pero pasa muy frecuentemente). En el caso de que te chisten o te digan algo, no trates de correr, no tiene sentido, y si van detrás de ti y te cogen, a lo mejor te multan pero por haber intentado torearles, no por tocar. Dedícate a asumirlo, pon cara de buena gente en plan: “me ha pillado usted, señor cono”, y vete con la música a otra parte. No son un peligro para ti como artista, cumplen unas normas, y debes pensar que al final los conos están para hacer del metro un lugar más seguro; y tenemos anécdotas donde hemos agradecido y aprobado su intervención, pero eso pertenece a otra historia.

¿Cuánto se puede esperar ganar tocando en el Metro?

Este es uno de los aspectos más variables, inexplicables, pero a la vez estables que tiene el Metro. Sinceramente nunca hemos llegado a establecer relaciones lógicas entre las condiciones que se han dado cuando hemos ganado más y cuando hemos ganado menos. Es cierto que el target que da más dinero suele ser el de la mujer española de entre 16 y 35 años aproximadamente, pero esto no es impedimento para que de repente un tío con pinta de mendigo te suelte 2€; nos ha pasado de todo.

Habrá que tener en cuenta que lo que se gane en el Metro dependerá de la línea, del día de la semana y del año, y de la hora. Evidentemente no podemos esperar ganar lo mismo un 15 de agosto a las 14:00h, que un 24 de diciembre a las 18:00h, y además creo que intuitivamente se percibe que las ganancias podrían ser mayores ese último día.

Para elegir bien el momento y el lugar, se debe aplicar únicamente el sentido común. Podríamos hablar de muchos aspectos concretos, pero el mejor método es prueba y error, sobretodo porque lo que nos ha funcionado a nosotros no tiene por qué funcionarte a ti. De todas formas, por añadir el morbo de la cifra, os diremos que lo normal es que saquemos unos 20€ por hora entre los dos, lo cual está mejor que muchos trabajos que podríais imaginar fácilmente. Hay que tener en cuenta también, que no es tan simple como estar 8 horas y ganar 160€; debemos ser conscientes de que a la hora de comer no se ganará apenas nada, y lo mejor será irse a comer algo y descansar; y también debemos saber que habrá días en los que gestionaremos peor nuestro tiempo, y en vez de 20€ la hora, serán 10€.

Finalmente añadiremos un aspecto que siempre nos ha parecido interesante. Cuando vamos juntos a tocar, recaudamos más siempre que cuando uno va solo, por su cuenta. Por supuesto este dinero se reparte a partes iguales, pero si digamos, uno estuviera 3 horas, y ganara 30€ él solo, entre los dos serían 60€, quedándose en lo mismo por cabeza. Esta es de esas reglas no escritas, que aunque no demasiado lógicas, os aseguramos que es de las que más se cumplen. De todas formas lo que sí que está claro, es que el tiempo se hará más ameno y la experiencia será más divertida con una buena compañía, así que os recomendamos hacerlo, como maximísimo en grupos de 3 personas.

¿Cómo es tocar en el metro?

Hemos dejado finalmente este apartadopara hablaros de nosotros, en el sentido de cómo ha sido y qué nos ha supuesto tocar en el Metro.

Es cierto que es algo que al principio te planteas como una aventura, y nos ha gustado mucho y nos ha dado dinero bastante tiempo, así como anécdotas curiosas. En nuestro caso sin embargo, ya no es lo mismo que hace unos años, y cuando lo conoces tan bien y te mueves con tanta seguridad, sólo bajas realmente cuando necesitas dinero, por lo que lo hemos dejado de hacer al perderse factor romántico que tanto nos gustaba. Quizá es el motivo por el que hemos decidido compartir un conocimiento, que aunque parezca trivial, para nosotros ha tenido una importancia fundamental y nos ha costado muchas horas reunir y.

Más allá de nuestra experiencia,hemos compartido todo lo que habéis leído para animaros a todos los que queráis aventuraros a jugar al gato y al ratón con nuestros amigos los conos; eso sí, citad el copyright, ¡lo de los “conos” se le ocurrió al gran Javi Mugueta!